Uno de los gastos anuales que es necesario revisar cada cierto tiempo es el seguro del vehículo.
Cada vez son más las compañías que publican ofertas con precios más competitivos, pero antes de pedir el presupuesto de seguro de coche, es necesario saber realmente qué conviene que esté cubierto para evitar incrementar el precio de la póliza.
¿Un seguro a todo riesgo?
Aunque es la opción más cara de todas, lo cierto es que suele ser la elegida por los usuarios que sacan el coche del concesionario nuevo. Al menos durante el primer año y, en algunos casos, incluso alargándolo hasta dos o tres más.
Todo depende del vehículo ya que, durante ese tiempo, su valor aunque va devaluándose, merece la pena ya que no solo cubre los arreglos en caso de colisión sino que incluiría el reemplazo o incluso reparación si resultara dañado o robado. Obviamente entre sus coberturas están las de incendio, vandalismo o elementos meteorológicos, algo que en otras pólizas se necesita añadir.
Existe, cada vez más, el todo riesgo con franquicia, una opción que permite abaratar el coste siempre que el asegurado se comprometa a cubrir cierto importe en caso de incidentes.
¿Un seguro a terceros?
En este caso, cubriría los desperfectos de otro vehículo en caso de que el accidente, colisión o incidente sea responsabilidad del titular de la póliza. Aunque en este caso rebaja bastante el precio, es necesario incluir ciertos condicionantes añadidos como el robo, lunas o incendio.
También es necesario conocer cómo funciona en este caso la asistencia en carretera, si permiten elegir el taller al que llevar el coche a reparar en caso de necesidad o incluso si dentro del mismo incluyen alguna cláusula como el seguro de decesos, la reclamación de multas o incluso la cobertura en caso de necesitar recuperar los puntos.
Esta opción de terceros ampliado es cada vez la más demandada por el público que ve cómo el pagar de más no siempre significa estar mejor cubierto.
Lo que sí está claro es que es necesario garantizarse una póliza con una aseguradora de confianza y prestigio que, llegado el momento, responda de verdad ante las necesidades y cláusulas contratadas sin excusas. A veces, hacer un estudio de mercado es crucial para decidirse por la mejor.
